lunes, 4 de abril de 2011

Aromas de Sevilla

Pascual González y Cantores de Híspalis


Dios creo al burro y le dijo: “Seras burro, trabajaras incansablemente de sol a sol, cargaras bolsas en el lomo, comerás pasto, no tendrás inteligencia, vivirás 30 años, seras burro.”

El burro respondió y dijo: “Seré burro, pero vivir 30 años es demasiado, dame apenas 10 años.”

Dios creo al perro y dijo: “Cuidaras de la casa de los hombres y seras su mejor amigo. Comerás los huesos que te den, y vivirás 20 años.”

El perro respondió: “Señor, vivir 20 años es demasiado, dame solamente 10 años.”

Dios creo al mono y dijo: “Seras mono, saltaras de árbol, en árbol, haciendo payasadas simpáticas, serás divertido y vivirás 20 años.”

El mono respondió: “Señor, vivir 20 años es demasiado, dame solamente 10 años.”

Finalmente Dios creo al hombre y dijo: “Seras hombre, el único ser nacional sobre la faz de la tierra, usaras la inteligencia para sobreponerte a los demás animales de la naturaleza. Dominaras al mundo entero, vivirás 30 años.”`

El hombre respondió: “Seré hombre, pero vivir 30 años es muy poco. Dame los 20 años que el burro rechazo, los 10 años que el perro no quiso y también los 10 años que el mono rechazo.”

Así lo hizo Dios: el hombre vive 30 años como hombre, se casa y pasa a vivir 20 años como burro, trabajando y cargando todo el peso en el hombro, después se jubila y vive 10 años de perro, cuidando de la casa, para luego vivir los 10 años del mono, saltando de casa de un hijo al otro, haciendo payasadas para divertir a los nietos.